El príncipe Andrés abandona las redes sociales ante el caso de agresión sexual en EEUU
El segundo hijo de la reina Isabel II, el príncipe Andrés, desactivó sus cuentas en las redes sociales, según los usuarios el miércoles, ya que se enfrenta a un caso civil en Estados Unidos por agresión sexual.
En la cuenta Twitter de Andrés @TheDukeOfYork aparece ahora un mensaje que dice "Esta cuenta no existe". Su perfil YouTube también aparece con un mensaje de error y la imagen de un mono. Las páginas de Instagram y Facebook del príncipe parecen seguir abiertas, aunque la de Instagram está configurada como privada.
El Daily Mail citó a una fuente cercana al príncipe, de 61 años, afirmando que estas cuentas también fueron eliminadas y ya no están activas.
Esto se produce después de que la semana pasada se anunciara que el príncipe dejó de utilizar su título de SAR, o Su Alteza Real, y también renunció a los títulos militares honoríficos otorgados por la reina.
Esta medida le aparta de la vida real oficial.
Su acusadora, Victoria Giuffre, declaró que tuvo relaciones sexuales con el príncipe a los 17 años, tras conocerlo a través del difunto financiero estadounidense y pedófilo condenado Jeffrey Epstein.
El príncipe niega las acusaciones, pero perdió un intento de desestimar la demanda civil.
Andrés se retiró de la vida pública como miembro de la realeza en 2019 luego de una entrevista con la BBC ampliamente ridiculizada, en la que trató de reivindicarse de la acusación de haber agredido sexualmente a una menor.
Desde entonces ha sido fotografiado ocasionalmente conduciendo o montando a caballo por la finca privada de la reina en el este de Inglaterra, pero no apareció en las fotografías oficiales de la boda de su hija Beatrice en 2020.
En otros signos de ostracismo social, una prueba hípica británica, the Duke of York Stakes, cambiará de nombre para evitar cualquier relación con el príncipe.
Y una comisaría de policía de Devon, en el sur de Inglaterra, retiró una placa que decía que había sido inaugurada por el Duque de York, alegando una queja de un miembro del público, según informó la BBC esta semana.
A.Fallone--PV