La transición energética del sector aéreo británico hará subir los precios
El coste de reducir las emisiones de carbono en el sector británico del transporte aéreo repercutirá en el precio de los billetes, lo que ralentizará el crecimiento de la demanda por parte de los pasajeros, según un informe publicado el lunes.
Sustainable Aviation, organización que reúne a los diferentes actores en la transición energética del sector de la aviación, predice en este informe que el coste de la descarbonización provocará una reducción de la actividad en 2050.
"Sin embargo, esta modelización también muestra que, incluso con unos costes ligeramente más elevados, la gente seguirá queriendo volar, con un crecimiento global de pasajeros de casi 250 millones para 2050", señaló la organización en un comunicado.
El sector aéreo, que se está recuperando del descenso de la actividad durante la pandemia de covid-19, se enfrenta al aumento de los costes asociados a la compra de créditos de carbono y de combustible de aviación sostenible (SAF por sus siglas en inglés) para reducir su impacto climático.
En la actualidad, el sector contribuye en un 3% a las emisiones mundiales.
Sustainable Aviation pide al gobierno británico que tome medidas "urgentes" para apoyar la inversión en innovaciones que reduzcan las emisiones de carbono.
"Estamos en una década crítica en la que la aviación debe demostrar que va a descarbonizarse", mientras "Estados Unidos y Europa avanzan en la carrera por crear nuevas industrias de combustibles y tecnologías sostenibles para la aviación", según el presidente de Sustainable Aviation, Matt Gorman.
El Reino Unido, que aspira a la neutralidad de carbono para 2050, "tiene todas las ventajas naturales" para acompañar este movimiento, consideró. "Pero tenemos que actuar con rapidez", agregó.
El SAF es un biocombustible que produce menos emisiones de carbono que el combustible de aviación tradicional, pero cuya producción es actualmente más cara. Según el informe, podría representar tres cuartas partes del combustible para reactores del Reino Unido en 2050.
Las tecnologías de captura y secuestro de carbono, aún poco desarrolladas, también son muy caras. Otras, como el hidrógeno y los aviones eléctricos, están aún muy poco desarrolladas.
La industria aeronáutica de la Unión Europea también teme quedar rezagada frente a competidores exteriores que no estén sujetos a sus restrictivas normas y a los costes de reducir las emisiones de carbono.
A.Rispoli--PV