Corte brasileña retoma juicio clave para el futuro de las tierras indígenas
El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil reanudó este miércoles un juicio clave sobre una tesis que limita el reconocimiento de nuevas tierras indígenas, consideradas por expertos una importante barrera contra la deforestación.
Hasta el momento, cinco jueces votaron por rechazar la tesis del llamado "marco temporal", que restringe ese reconocimiento, contra dos votos a favor de validarla, en un trámite que se inició en agosto de 2021.
El "marco temporal" solo reconoce como territorios indígenas aquellos ocupados o en disputa por los pueblos originarios cuando se promulgó la Constitución, el 5 de octubre de 1988.
"Estamos juzgando el destino de los pueblos originarios de nuestro país", dijo este miércoles Antonio Dias Toffoli, quinto magistrado en rechazar esa tesis.
Aún faltan cuatro jueces del STF por votar, y los debates serán retomados el jueves. Falta apenas un voto más para que el marco sea rechazado por mayoría (al menos seis votos de 11).
Representantes de pueblos indígenas se movilizaron en Brasilia para acompañar el juicio, en alerta por el potencial impacto de la decisión en sus comunidades.
Estas rechazan el marco temporal argumentando que muchos pueblos originarios fueron expulsados a lo largo de la historia de sus territorios ancestrales, especialmente durante la dictadura militar (1964-1985).
La corte decidirá en concreto sobre una causa que abarca al territorio Ibirama-Laklano, en Santa Catarina (sur), pero el veredicto podría afectar a muchas otras tierras en disputa.
"Estamos aquí por nuestros ancestros (...) (y porque) queremos que las nuevas generaciones tengan asegurado un futuro mejor", dijo durante una conferencia de la Articulación de Pueblos Indígenas de Brasil (APIB) Isabela Xokleng, líder del pueblo cuyo territorio está en el centro de los debates.
"La garantía de la permanencia en las tierras tradicionalmente ocupadas es indispensable para el cumplimiento de sus derechos", justificó el juez Cristiano Zanin al respaldar la tesis defendida por los indígenas en la sesión del 31 de agosto.
El "marco temporal", en cambio, cuenta con el apoyo de representantes del poderoso agronegocio brasileño, que consideran ese límite necesario para dar "seguridad jurídica" a los grandes productores rurales.
Uno de los jueces que votó contra el límite temporal propuso una solución alternativa: que el Estado indemnice a aquellos productores rurales que hayan ocupado y adquirido tierras "regularmente y de buena fe".
Se espera que los magistrados del STF también debatan y alcancen un acuerdo sobre esa propuesta.
La población indígena de Brasil es de casi 1,7 millones de personas, equivalente al 0,83% de los 203 millones de habitantes del gigante sudamericano, según el censo.
Y.Destro--PV